Bitácora de una comunicadora en El Salvador
¡Hola a todos/as! Hoy les vengo a contar sobre mi experiencia de voluntariado en Centroamérica.Mi nombre es Moira Castillo y soy estudiante internacional de Periodismo y Ciencias Políticas de la Universidad Carlos III de Madrid.
Actualmente estoy en El Salvador, o el Pulgarcito de América, como me dicen los lugareños, realizando un voluntariado de tres meses en la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, ubicada en la capital del país, rodeada de playas, volcanes y un clima tropical.Mi principal tarea como voluntaria es apoyar a la encargada de la Dirección de Innovación Educativa en el área institucional del equipo, principalmente haciendo los boletines mensuales, manuales de uso y canales de comunicación y presentaciones para proyectos de educación superior. Aunque también asisto al técnico multimedia en los eventos audiovisuales, ahí lo apoyo con las cámaras, los equipos y las transmisiones.
Lo que más me gusta del equipo son los proyectos en los que se involucran en cada ciclo, porque efectivamente son un aporte al contexto nacional y siempre están pensados para apoyar a la comunidad. Por ejemplo, creamos junto a otras unidades de la UCA (la universidad en la que estoy) módulos para brindar espacios de entendimiento y seguridad para los docentes. Además, iniciamos módulos de capacitación en tecnología y métodos de enseñanza y evaluación para profesores, y también hemos trabajado en guías de recursos para que los estudiantes puedan adentrarse en el mundo de la innovación de la mano de las TIC.
Lo que más me gusta es que siempre hay algo que hacer, recibes feedback y puedes ayudar a cada uno de los diferentes puestos con sus tareas, pero también hay espacio para proyectos personales, incluso contactando a otros profesionales de la comunicación, aquí siempre te brindan apoyo y espacio.
En cuanto a mi experiencia personal, me ha tocado compartir con gente realmente amable desde que llegué al aeropuerto y a la residencia. Incluso si me ven perdida en la calle o en el supermercado, me preguntan cómo pueden ayudarme. En la misma línea, la mayoría de los integrantes del equipo llevan trabajando mucho tiempo en la UCA, pero siempre te incluyen, pues por temas de fechas pasé mi cumpleaños n°21 aquí, lejos de mis amigos y familia, pero me sentí muy feliz y agradecida cuando me celebraron el lunes a primera hora con pastel y dibujitos en la pizarra del aula multimedia.He tenido la oportunidad de conocer bastante de la cultura salvadoreña con compromiso y dedicación, puesto que siempre están dispuestos a enseñarte sus costumbres, creencias e historia.
Una de las cosas que más disfruto es cuando me piden que les enseñe palabras españolas y chilenas, mientras ellos intentan que “me vaya como toda una salvadoreña”. Aunque estoy a pocas semanas de finalizar mi estadía, estoy conforme por haber podido aportar un granito de arena en la visión y misión educativa de la UCA. Sin duda pienso volver a visitar a los miembros del equipo, comer pupusas y recorrer las playas de arena negra más bonitas que he visto.